sábado, 28 de julio de 2007

Crucial victoria de las travestis de Buenos Aires. Presentadas disculpas por un ministro del Gobierno de la Ciudad Autónoma

De Prensa FALGBT. Enviado por Rocío Suárez, de México.


Martes 24 de Julio del 2007


"Les pedimos disculpas", dijo el ministro Velasco, y anunció la derogación de la resolución


MOVILIZACIÓN A LA JEFATURA DE GOBIERNO CONTRA LA RESOLUCIÓN REPRESIVA DE GARCÍA ELORRIO

Luego de la exitosa movilización realizada por activistas de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans, el ministro de Medio Ambiente del gobierno porteño, Juan Manuel Velasco, recibió a una delegación de ATTTA y la FALGBT y pidió disculpas en nombre de Telerman.


Cerca del mediodía de hoy, la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT) y la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgénero de Argentina (ATTTA) realizaron una masiva concentración frente a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, en contra de la resolución represiva dictada por el subsecretario de Espacios Protegidos, Javier García Elorrio, quien días atrás dispuso prohibir la oferta y demanda de sexo en el Rosedal.

El funcionario había manifestado que "los travestis se han apropiado del Rosedal". Ante semejante declaración, dirigentes trans de la Federación le respondieron en que "A las personas trans nos gustaría 'apropiarnos' de espacios distintos al Rosedal. Nos gustaría apropiarnos de una carrera universitaria, nos gustaría apropiarnos de un trabajo digno, nos gustaría apropiarnos de una vivienda, nos gustaría apropiarnos de un documento que diga nuestro nombre, nos gustaría apropiarnos de la oportunidad de vivir una vida que no dependa de proxenetas, policías corruptos y funcionarios transfóbicos "

Dicha respuesta formó parte de una carta abierta al jefe de Gobierno, Jorge Telerman, que fue leída en la concentración por activistas trans de la Federación, integrantes de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgénero de Argentina. En la carta, la Federación repudiaba la resolución represiva y exigía al gobierno porteño políticas de inclusión social, laboral, educativa y sanitaria para las personas trans.

También participó de la concentración la legisladora porteña Gabriela Alegre, quien se hizo presente para expresar su solidaridad con las compañeras travestis y ponerse a disposición.

Durante la concentración, un grupo de activistas de la Federación, integrado por su presidenta, María Rachid, su vicepresidenta, Marcela Romero, su secretario de Relaciones Institucionales y Prensa, Bruno Bimbi, y la activista trans Claudia Pía Baudracco, mantuvieron una reunión con el ministro de Medio Ambiente del Gobierno de la Ciudad, Juan Manuel Velasco y la jefa de gabinete del Ministerio, Claudia Moy Peña.

En la reunión, el ministro expresó que pedía disculpas a las travestis en nombre del Gobierno de la Ciudad y anunció que la resolución dictada por García Elorrio quedaba sin efecto. El ministro manifestó que dicha resolución había sido dictada en forma inconsulta por el subsecretario, y que su contenido no expresaba la filosofía del Gobierno. Por otra parte, Velasco convocó a la FALGBT a participar de una reunión que se realizará en las próximas semanas, con representantes de diversos ministerios, a fin de consensuar políticas de inclusión social para las personas trans.

"El ministro nos expresó en tres oportunidades que nos pedía disculpas, y se comprometió con la Federación a crear un espacio de diálogo para consensuar políticas antidiscriminatoria s y de inclusión social. Esto demuestra que el camino de la organización y la movilización consigue resultados. Lo que conseguimos, lo conseguimos porque nos organizamos y vinomos juntos y juntas a defender nuestros derechos. Ahora, seguiremos trabajando y, si es necesario, reclamando para que estos compromisos se cumplan ", expresó en el final de la concentración la presidenta de la FALGBT, María Rachid.



Reproducimos a continuación la carta abierta que fue leída por las activistas de ATTTA durante la concentración:


CARTA ABIERTA AL JEFE DE GOBIERNO DE LA CIUDAD

Hace unos días, un funcionario de su gobierno, Javier García Elorrio, ha pretendido ganar fama con una resolución mediática en la que prohíbe la oferta y demanda de sexo en El Rosedal. Para justificarlo, ha dicho a la prensa que " los travestis se apropiaron" de este parque, que debería ser "para el disfrute de la gente", concepto en el que parece no incluirnos.

Desde la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgénero de la Argentina (ATTTA), red nacional integrante de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans , queremos compartir con usted y con toda la comunidad algunas reflexiones que el discurso de su funcionario maliciosamente omite.

A las personas trans nos gustaría "apropiarnos" de espacios distintos al Rosedal. Nos gustaría apropiarnos de una carrera universitaria, nos gustaría apropiarnos de un trabajo digno, nos gustaría apropiarnos de una vivienda, nos gustaría apropiarnos de un documento que diga nuestro nombre, nos gustaría apropiarnos de la oportunidad de vivir una vida que no dependa de proxenetas, policías corruptos y funcionarios transfóbicos. No queremos apropiarnos del Rosedal. Queremos, sí, comer, llenar el plato, sobrevivir. ¿Usted y su gobierno tienen alguna alternativa para ofrecernos?
Las personas trans sufrimos la discriminació n por nuestra identidad de género casi desde que tenemos uso de razón. Muchas de nosotras fuimos echadas de nuestra casa, rechazadas por nuestra propia familia La mayoría de nosotras no pudo terminar la escuela, no por falta de voluntad, sino porque el sistema educativo nos expulsa por ser diferentes. Incluso quienes la terminamos, nos cansamos de buscar y buscar trabajo, de sentir cómo nos cerraban la puerta en la cara. La mayoría de nosotras no tenemos ni siquiera un documento que diga nuestro nombre, y tenemos que hacer la cola de la mesa masculina cuando vamos a votar, ser llamadas con nombre de varón en la sala de espera de los hospitales o soportar que su subsecretario se refiera a nosotras como "los" travestis, y buena parte de la prensa reproduzca ese discurso.
Queremos trabajar de otra cosa. ¿A usted le gustaría prostituírse? ¿Le gustaría estar en la calle, en alguna "zona roja", esperando que aparezca un cliente? ¿Le gustaría ser extorsionado por la policía y tener que pagar con dinero o favores sexuales el derecho a sobrevivir, a no ser asesinado, golpeado o llevado a una comisaría? A nosotras no nos gusta.

¿Cuándo piensan, quienes gobiernan, mirarnos a la cara para hacer algo más que echarnos de donde quiera que estemos? ¿Cuándo van a pensar en cómo crear las condiciones para que tengamos una vida digna, en vez de tratarnos como escoria?
El discurso de quienes dicen, como el legislador Enríquez, que la prostitución debe ejercerse en lugares privados (¿departamentos privados?), y alejarse de la calle, esconde las consecuencias que eso tiene: la prostitución ejercida en espacios privados es el negocio de la esclavitud y la trata de personas, que regentean los mismos sectores que piden represión en nombre de "la moral y las buenas costumbres". ¿O usted no sabe quiénes son los dueños de esos departamentos?

Nosotras queremos trabajo digno. Queremos terminar la escuela. Queremos tener una casa donde vivir. Queremos ser reconocidas con nuestro nombre y nuestro género. Queremos ser atendidas en los hospitales sin ser humilladas. Queremos que la policía esté para protegernos y no para extorsionarnos, golpearnos, violarnos o matarnos.

Las personas trans, luego de casi 25 años del fin del Proceso, todavía vivimos bajo la dictadura. El Nunca Más no nos ha alcanzado, y día a día nos siguen matando. En varias provincias, existen Códigos Contravencionales y de Faltas que nos criminalizan, con tipos penales inconstitucionales tales como: " El que se vistiere o se hiciere pasar por persona del sexo contrario y ocasionare molestias, será reprimido con arresto hasta veinte días" (Santa Fe), o "El que se exhibiere públicamente con ropas de otro sexo, siempre que la costumbre lo reprima, salvo durante las fiestas de carnaval u otras que estuviere permitido (...) " (Santiago del Estero). Nosotras seguimos viviendo en la dictadura. ¡Queremos ingresar a la democracia!

Señor jefe de Gobierno: le proponemos un trato. Trabajemos juntos para terminar con la trata de personas y la esclavitud sexual. Trabajemos juntos para que el destino de las personas travestis y transexuales sea otro que la calle. Trabajemos juntos para terminar con la discriminació n y la transfobia.

Usted debe decidir de qué lado está. Mientras tanto, nosotras vamos a defender nuestra fuente de trabajo, hasta tanto el Estado y la sociedad nos ofrezcan otras alternativas para tener una vida digna. No nos van a echar del Rosedal ni de ningún otro lugar. Tendrán que pensar en soluciones que nos incluyan, o se encontrarán con nuestra resistencia.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Destaco ésto como lo imprescindible que debe darse de una vez por todas:
"A las personas trans nos gustaría 'apropiarnos' de espacios distintos al Rosedal. Nos gustaría apropiarnos de una carrera universitaria, nos gustaría apropiarnos de un trabajo digno, nos gustaría apropiarnos de una vivienda, nos gustaría apropiarnos de un documento que diga nuestro nombre, nos gustaría apropiarnos de la oportunidad de vivir una vida que no dependa de proxenetas, policías corruptos y funcionarios transfóbicos "
Y para cerrar: "Queremos trabajar de otra cosa. ¿A usted le gustaría prostituírse? ¿Le gustaría estar en la calle, en alguna "zona roja", esperando que aparezca un cliente? ¿Le gustaría ser extorsionado por la policía y tener que pagar con dinero o favores sexuales el derecho a sobrevivir, a no ser asesinado, golpeado o llevado a una comisaría? A nosotras no nos gusta.
¿Cuándo piensan, quienes gobiernan, mirarnos a la cara para hacer algo más que echarnos de donde quiera que estemos? ¿Cuándo van a pensar en cómo crear las condiciones para que tengamos una vida digna, en vez de tratarnos como escoria?
El discurso de quienes dicen, como el legislador Enríquez, que la prostitución debe ejercerse en lugares privados (¿departamentos privados?), y alejarse de la calle, esconde las consecuencias que eso tiene: la prostitución ejercida en espacios privados es el negocio de la esclavitud y la trata de personas, que regentean los mismos sectores que piden represión en nombre de "la moral y las buenas costumbres". ¿O usted no sabe quiénes son los dueños de esos departamentos?"

Anónimo dijo...

Sobre este tema de oportunidades a la comunidad de trans que trabajan prostituyéndose quiero opinar nuevamente porque me toca muy de cerca (mi novia/pareja es trans -trabaja en la calle-, fui cliente una vez y desde esa vez estamos juntos):
Lamento ver (porque así han quedado, las han dejado) a muchas trans casi o totalmente derrotadas mentalmente, autoconvencidas que están para morir en ésta y que no hay otro camino... y las entiendo. Despojadas de toda esperanza, discriminadas, humilladas en la calle con burlas al paso o miradas incisivas, apartadas de la escuela, sin oportunidades laborales, apretadas o abusadas por la policía, carne de cañón de fiolos y un largo etc.
Ellas mismas se ven y autoconvencen de que están en un corto camino en esta vida para 'pasarla lo menos peor posible'; zafar/sobrevivir. Y en ese 'zafar' está la mierda (sepan disculpar) de la droga (merca, porros, pasta base, pastillas, etc.) y el alcohol que 'ayudan' a pasar las noches de frío (por estos meses insoportable en Argentina) y soledad.
Estar en una esquina hora tras hora, actuando con cada cliente potencial para poder hacer una salida y ganarse la vida y los riesgos que conlleva cualquier cliente como también los transeúntes borrachos y/o agresivos, fiolos y pupileras, etc., es realmente de una fortaleza mental increíble, que muchas veces se quebranta. Lo se porque lo he visto; he estado hasta 6 hs. seguidas en la 'zona roja' en mi ciudad (Córdoba, Argentina) observando todo eso en la misma calle, pasé frío viendo trabajar a mi pareja (quise saber lo que es bancarse eso, la quería entender fuera de mi cómodo dormitorio) y pude ver el frenetismo de la noche y otras cosas que dejaba ver.
Estoy convencido de que SE PUEDE, se puede salir pero no sola. Se necesita a alguien al lado que acompañe, que de ese empujón, que de ese ánimo para salir adelante, a pesar de la sociedad 'inquisidora' (o al menos gran parte de ella) y obvio un poco de ahorro para comenzar.
Por todo esto deben fomentarse los microemprendimientos para estas situaciones, el Estado debe estar presente.

Kim Pérez dijo...

Eduardo, quisiera publicar este testimonio directo, desde fuera-desde dentro, como una entrada independiente, pero te pido tu permiso.

Acerca de los microemprendimientos, ¿está presente en la Argentina el sistema de los microcréditos? Aquí se dan al parecer con buen resultado sobre todo a mujeres, por su estabilidad emocional, que es lo que nos suele faltar... Pero la experiencia de haber visto de cerca el matadero, que tan crudamente describes en esa misma línea, puede darles a algunas compañeras esa estabilidad, aunque sean pocas, y multiplicar luego sus resultados por el efecto demostración.

Un saludo amistoso de

Kim

Anónimo dijo...

Kim, gracias por escribir en respuesta a mi comentario. Con todo gusto tienes mi aprobación. Grito afónico a los 4 vientos porque UNA sólo UNA pueda dar el salto (en eso estoy yo tratando de fomentar la idea en mi pareja de que SE PUEDE salir, yo hasta he estado viendo de sacar un préstamo para poner algo juntos, pero a veces su mente parece resignada -tiene 22 años y 3 que trabaja- y poco puedo contra eso y la influencia de la noche; sinceramente suelo desesperar)...
Te comento que aquí sí existen los préstamos para microemprendimientos, en el caso de mujeres hay un Banco de la Mujer, x ejemplo. El tema de un microcrédito es que lo dan a gente con salario fijo y legal. Debería averiguar ese tema...

Un abrazo muy grande, Eduardo.